Para este año prometiste que ordenarías tus platas. Que gastarías menos, que ahorrarías más, y que dejarás de comerte toda tu línea de crédito. Hasta pensaste en independizarte y emprender ese negocio que no te deja dormir en las noches.

Pero no sacas nada con hacerte estas promesas si no eres libre financieramente.
En su nuevo libro “Libertad para todos: Un Manifiesto para Reclamar la Libertad Financiera y Política”, el consultor estadounidense Rick Newman explica que toda persona puede romper estas cadenas siguiendo estos principios:
  1. Mantente en movimiento.
Busca trabajo siguiendo objetivos tanto profesionales como financieros. Comprométete con empleadores que te permitan flexibilidad, aprecien tu talento, y te den el empujón para crecer.
Cámbiate si no estás conforme. Planifica bien tu salida, porque ahí no sólo quedas mal con tu empleador para futuras referencias, sino también puede afectar tus finanzas.
Y si lo tuyo es emprender, hazlo. Proyecta bien tus ahorros e inversiones, para tener diversos colchones dónde recostarte durante los primeros años, que serán los más difíciles.
En 2013, Chile alcanzó su nivel más alto de movilidad laboral desde 2010, superado sólo por Brasil, con 23% de las personas buscando activamente cambiarse de trabajo no por peligrar el despido, sino porque están quieren más, según el índice Workmonitor.
  1. No te vuelvas obsoleto.
No es un cliché. Conocer tus fortalezas y debilidades tanto personales como profesionales es muy útil.
Si trabajas en un sector en el cual la tecnología está reemplazando la mano de obra, quizás es momento de hacer un cambio. O bien, desarrollar tus capacidades con capacitación y estudios, para volverte un componente indispensable para tu empresa.
Esto requerirá que inviertas en ti mismo. Lo sabemos, tienes cuentas que pagar, deudas, compromisos…
Pero insistimos, si empiezas a ver la inversión como primera en tu lista de prioridades, y no como el destino de lo que te sobra del sueldo, podrás equilibrar estos asuntos, como te contamos en nuestra nota Dime cuánto ganas y te diré en qué puedes invertir.
En Chile, los trabajadores más capacitados son los más satisfechos, según el estudio Primer Observatorio de la Capacitación Laboral en Chile de la Universidad de Santiago de Chile (USACH) y Otic Proforma.
  1. No te sobrendeudes.
El consumo personal excesivo hace mal. A medida que aumenta el endeudamiento de las personas, menor el margen de maniobra ante una crisis o eventualidad.
Y los chilenos somos buenos para endeudarnos, como te comentábamos en el artículo Dicom: Todo lo que debes saber para no caer… o saber si caíste.
Según un reciente sondeo de SURA Asset Management, 58% de los chilenos encuestados dijo que no podía ahorrar voluntariamente por estar endeudado. Para saber más, lee el artículoaquí.
  1. Empodérate con la información.
Las personas toman malas decisiones principalmente cuando están estresadas o desinformadas.
Aprende a identificar qué te detiene, las razones detrás de ello, y busca una solución. Entre ellas, está el estudio.